jueves, 28 de agosto de 2008

Con sabor a triunfo


Era el mes de Junio y empezaba el torneo de fut bol en la escuela.

Como siempre el panorama era acaparado por los equipos de hombres, todas las carreras tenían su equipo y éste año por primera vez se iba a invitar también a que participaran a los de la prepa. Es decir, se olía fut bol por todos lados.


Electrónica tenía 3 años siendo campeón y teníamos la certeza que éste año no sería diferente. No es por amor a la camiseta, pero en realidad en el área había muy buenos jugadores, bueno, al menos al nivel de fut que se jugaba en la escuela.


El premio no era nada, así es, nada. Sí se pedía un cantidad para inscribir a tu equipo, pero eso era una “donación” para la escuela. Digamos que se jugaba por "Amor al arte".


En los 4 grados de Electrónica solo éramos 13 mujeres y como la misma carrera lo indica éramos de todo tipo excepto de la bonitas, ropa linda y candidatas a reinas de la escuela; digamos que proliferaba mas el tipo “nerd”. Pero eso no significaba que no nos dejaramos influenciar por la fiebre del momento!


Un día en la tarde a las féminas de nuestro salón se nos ocurrió formar nuestro equipo, sí, por primera vez en la vida y en 3er año de la carrera quisimos hacerle a eso del deporte. Teníamos poco que perder y mucho que ganar. Si llegábamos a ganar el campeonato nos exentarían en 3 materias, además que durante un mes podríamos salir a las 2pm para entrenar.


Solo existía un problemita, para que nos aceptaran en el torneo y nos abrieran tiempo entre los partidos de los caballeros, teníamos que inscribirnos por los menos 6 equipos. De dónde fregados sacaríamos 6 equipos si solo eran 4 carreras!!!!.
Armadas de valor y casi casi con el rostro de Cuauhtémoc Blanco con estancarte fuimos a la preparatoria a invitar a que formaran sus equipos. Cosa que funcionó, ya que de ahí salieron 3. No sin antes prometerles como premio Diplomas y $200 en efectivo ja!


Día 1. Nuestro entrenador consiguió los conos anaranjados y nos puso a entrenar con el balón 1 hora.
Día 2. El auxiliar técnico eligió quien sería la portero y nuestra tiradora estrella.
Día 3. Calentamientos y correr en una cancha profesional por hora y media.
Día 4. Día de asueto nacional que aún así significó llegar a las 7 am para entrenar en una cancha de fut bol rápido.
Día 5. Juego amistoso con la liga profesional de la Ciudad (tenía contactos nuestro entrenador) y fue nuestro primer calentamiento.
Día 6. Consejos porfesionales, charla motivacional y elección del uniforme.


El día había llegado. Nos veíamos tan monas con nuestro short azul y playera roja.
Habíamos hecho tanto escándalo que la canchita estaba lleno de admiradores, bueno, mejor digamos que de espectadores. Hasta nuestro profesores estaban ahí.


Salimos a ganar, eso es lo único que teníamos en mente, sed de triunfo!. Al fin y al cabo que tan buenas podrían ser las de Acuacultura.


Oh Dios mio! Ante nuestros ojos se aparece Carmen, una muchacha de complexión gruesa y alta. No corría pero que fácil te bloqueaba y tiraba, ese día entendí por qué su apodo de la "Tonina".


Que pensaba nuestro entrenador!!! Mucha filosofía pero jamás pensó que necesitaríamos reta por si alguien se lesionaba? No!!! Un jugador menos, una con la azúcar baja y 4 goles en contra.
¿Qué pasó con la goleadora del equipo? Quedan 15 minutos de juego y podemos remontar!!!! Ah sí, es la lesionada que está sentada afuera.


A diferencia de las películas, no salió alguien a salvarnos, ni ninguna sacó dotes escondidos, ni la de la azúcar baja, o sea yo, pudo correr mas.


Suena el silbato y el marcador muestra un final de 6-0.


Salimos de la cancha, mas que derrotadas, humilladas; y nuestro entrenador nos felicita, nos regala a cada una botella de Gatorade y nos dice que para ser nuestro primer partido estuvimos muy bien pero desafortunadamente no había repechaje y quedábamos fuera del torneo.


Así termino nuestra carrera futbolística. En un salón comiendo ceviche, salchichas con limón y chile y cortando un pastel el cual habían comprado el equipo varonil del salón para festejar nuestro triunfo.


Tiempos de gloria, tiempos de triunfos frustrados, tiempos que siempre llevarás en la memoria para reírte de ellos. :)

1 comentario:

Cl@udette dijo...

Jajajaja historias como esta creo que siempre tenemos alguna en el baul de los recuerdos, y aunque resultaron en su momento vergonzosas, hoy en día tienes la satisfacción de poder decir...lo hice.

Por algo los abuelos hacen bien al decir "recordar es volver a vivir"

Saludos